La naturaleza siempre se abre camino
Los paisajes de otoño salpicados de pequeñas setas me hacen pensar en la facilidad con la que la naturaleza se va abriendo camino. Simple, sabia y bella, siempre adaptándose a los cambios. Sin duda, un ejemplo en el que inspirarse.
Las fotografías que comparto hoy las tomamos en San José de los Llanos (Tenerife), dando un pequeño paseo. Me fascinaron las formas de las setas que crecen en cualquier parte; dentro de una piña, en el filo de una rama, entre rocas o debajo de un tronco seco.
Hace años asistimos a una charla con un experto en setas y nos reveló un mundo fascinante que desconocíamos. Nosotros no las recogemos para consumir porque no somos entendidos en la materia, sólo las observamos y fotografiamos. Es más seguro 😉.
Suelo pensar que "juego" a intentar retratar la belleza de lo simple y espero haberte podido transmitir esa sencillez y encanto que yo veo a mi alrededor cuando estoy en contacto con la naturaleza. ¿Misión cumplida?
¡Hasta pronto!
Buenas noches, Doña Candela, me alegro de leerla de nuevo.
ResponderEliminarMás que misión cumplida en esta serie de fotos dedicadas a las setas, que como bien dice, crecen en cualquier parte, como en el patio de casa si hay la debida humedad y uno no recoge las hojas de la higuera que su trabajo da recogerlas cada otoño.
A mí las setas me recuerdan al profesor de cuarto de básica que tuve y que era un buen aficionado a las ellas y como tal, nos advertía de que no nos aventuráramos a cogerlas por nuestra cuenta sin contar con la ayuda de un experto para evitar finales nada felices tras la comida en que estos hongos fueran los protagonistas o la guarnición de los mismos. De todas maneras, no soy aficionado ni a las setas ni a comerlas, pero sí a la fotografía, afición que comparto con Vd, en la que no siempre es fácil hacer algo excepcional de los sencillo y Vd, lo ha conseguido con estas fotografías, de belleza sin par, armónica paleta de colores quebrados y cálidos llenas de magia como la tercera fotografía, en la que ese grupo de setas parece una composición mágica de pequeños objetos y la penúltima, en la que la seta protagonista parece una lamparilla.
Espero ver pronto más fotos y desde aquí, saludos y bendiciones para todos. Cuídense.
¡Buenos días, don Pedro!
EliminarMuchas gracias por su visita. Las setas sí que crecen en cualquier sitio. Me imagino que por ahí, dada la humedad que tienen, deben abundar.
Hacía bien su profesor en advertirles del peligro que conlleva comer hongos sin saber sobre el tema. Dicen que cuanto más bonitas más peligrosas. No sé qué tendrá de cierto.
Gracias por su comentarios. Me encantan las tonalidades propias del otoño y siempre es un placer poder escaparme al monte y disfrutar de ellos.
Cuídense mucho. Bendiciones para usted y sus seres queridos.
Hasta pronto.
Buenas noches, Doña Candela!, espero que estén bien.
EliminarContestando a su pregunta, en teoría deberían haber muchas setas por aquí debido a la humedad del lugar que es mucha, pero si el otoño no es muy lluvioso, no se encuentran muchas y la prueba de ello es la insatisfacción que muchos aficionados a la búsqueda de setas demuestran algunos otoños.
En cuanto a lo que dicen de que las setas más bonitas son más peligrosas, eso también lo decía aquel profesor, mostrándonos aquellas láminas con setas ilustradas que hasta recuerdo que estaban exhibidas en las farmacias de aquel entonces y sí, las amanitas con el sobrero rojo y motas blancas y otras de caprichosas formas como trompetas barrocas eran letales según aquel buen hombre y ya que Vd. me ha recordado estas setas, me he puesto a buscar sobre ellas en la red y ¡mire lo que he encontrado!, toda una guía de setas por si le interesa saber más de ellas. Aquí le dejo el link.
https://www.cestaysetas.com/informacion-micologica/guia-de-setas/
Y a estas horas ya le dejo, esperando poder disfrutar pronto de sus maravillosos dibujos y de nuevas fotos, pero ya más bien de invierno, estación que hoy hemos comenzado y por si no nos leemos, dadas las fechas, les deseamos a todos unas felices fiestas dentro de lo posible, en las cuales reciban muchas bendiciones. Confín en que si Dios quiere, aún podré felicitarle el año nuevo. ¡Cuídense!