Aprendiendo

Un día, entre sesiones de quimioterapia, empecé a trazar rayas sin sentido y semanas más tarde me encontraba con la necesidad de dibujar.

Mi cuerpo estaba bajo mínimos pero mi mente no paraba de trabajar y era agotador. Sin embargo, cuando dibujaba o pintaba podía desconectar y entrar en un espacio de silencio y recogimiento. Algo así como un rincón de luz. Mi lugar de luz.

Siempre me consideré negada para temas artísticos. Quizás porque alguien me lo dijo de chica y yo seguí repitiéndomelo de mayor. A estas alturas de mi vida he dejado de ser tan crítica y he pasado a permitirme algunas licencias.

Y así surge este blog. Sin grandes pretensiones y con la idea de compartir dibujos, fotos, palabras, sueños.... Supongo que es como tirar una botella con mensaje al mar. No sabes si alguien lo recibirá, si le agradará o si será entendido. Si llegó hasta ti espero que te guste. ¡Bienvenido a mi lugar de luz!

viernes, 12 de marzo de 2021

Hasta donde la imaginación te lleve


 
Cuando descubrí el placer de la lectura se abrió ante mí un amplio abanico de posibilidades. Recuerdo que de niña, con un libro en la mano, imaginaba que podía trepar por escarpados acantilados, volar,  sumergirme en aguas profundas y acompañar a los protagonistas en sus locas y apasionantes aventuras. 

Los libros me han acompañado a lo largo de mi vida y algunos de ellos se han quedado para siempre. Hay historias que envuelven y atrapan, y contenidos que pueden conmover tanto como para cambiar nuestra filosofía de vida. 

Leer para mí es un momento íntimo. Cuando tengo un buen libro en las manos todo se difumina a mi alrededor y me sumerjo en palabras y sensaciones que hacen que disfrute de instantes mágicos.

En cada obra siempre hay algo que yo llamo perlas, que no son más que frases que te hacen reflexionar sobre la vida. Hoy comparto una pequeña selección esperando que te gusten:

-Cada libro, cada volumen que ves aquí, tiene un alma. El alma de la persona que lo escribió y de aquellos que lo leyeron, vivieron y soñaron con él. Cada vez que un libro cambia de manos, cada vez  que alguien baja sus ojos a las páginas, su espíritu crece y se fortalece.
La Sombra del Viento, Carlos Ruiz Zafón.

-Mientras el corazón late, mientras el cuerpo y alma siguen juntos,  no puedo admitir que cualquier criatura dotada de voluntad tiene necesidad de perder la esperanza en la vida.
Viaje al centro de la Tierra, Julio Verne.

-Es difícil en tiempos como estos pensar en ideales, sueños y esperanzas, sólo para ser aplastados por la cruda realidad. Es un milagro que no abandonase todos  mis ideales. Sin embargo, me aferro a ellos porque sigo creyendo, a pesar de todo, que la gente es buena de verdad en el fondo de su corazón.
El diario de Ana Frank.

-El misterio de la vida no es un problema a resolver, sino una realidad a experimentar.
Duna, Frank Herbert.

-Amor y deseo son dos cosas diferentes; que no todo lo que se ama se desea, ni todo lo que se desea se ama.
Don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes.

-Si buscas la perfección nunca estarás contento.
Anna Karenina, Leon Tolstoi

-Si mi vida va a significar algo, tengo que vivirla yo mismo.
El Ladrón del Rayo, Rick Riordan

-Cuando alguien se va, es porque alguien más está por llegar
El Zahir, Paulo Coelho.

-Seas quien seas, hagas lo que hagas, cuando deseas con firmeza alguna cosa es porque este deseo nació en el alma del universo. Es tu misión en la tierra.
El Alquimista, Paulo Coelho.

-No todo lo que es de oro reluce, ni toda la gente errante anda perdida.
El Señor de los Anillos, J.R.R. Tolkien

-No es necesario detenerse en los sueños y olvidarse de vivir.
Harry Potter y la piedra filosofal, J.K. Rowling

-El hombre llega mucho más lejos para evitar lo que teme que para alcanzar lo que desea.
El Código da Vincci, Dan Brown.

-Sé quien era esta mañana cuando me levanté, pero creo que he debido cambiar varias veces desde entonces.
Alicia en el País de las Maravillas, Lewis Carroll.

-Para volar a cualquier lugar tan rápido como el pensamiento, debes comenzar sabiendo que ya has llegado.
Juan Salvador Gaviota, Richard Bach.

¡Hasta pronto! Un abrazo.