¡Desde luego. Doña Candela!. Vd. lo ha dicho todo y cualquier comentario estaría de más. Como decía mi profesor de Literatura Española hace,....32 añitos atrás, "LO BUENO Y BREVE, DOS VECES BUENO". Gran verdad. ¡Qué recuerdos aquellos de aquella academia en la que estudié el llamado B.U.P. acrónimo de "Bachillerato Unificado Polivalente". ¡Quién pudiera volver a aquellos años con lo aprendido hoy!.
Bueno, a lo que importa que es apreciar estas fotografías que Vd comparte con nosotros de este parque eólico.
Son realmente muy bonitas y además, según parece o me da esa impresión, tomadas a la hora mágica, esa hora mística de atardecer que tanto me agrada. Son fotografías muy bien tomadas que me aportan paz y sosiego en este pequeño descanso que me he tomado para echar un vistazo a mi red social, hallando la sorpresa de su actualización.
Por cierto, las horas mágicas del atardecer cada día estarán más próximas. Mañana Dios Mediante -como decía aquel párroco-, el Sol entrará en la Constelación de Libra e ingresaremos en el Otoño en este hemisferio.
Y así como el Sol sigue su camino por el Orbe, Yo sigo el mío que me obliga a atender mis obligaciones hoy. Ha sido un placer ver su trabajo, dejar estas letras y saludarla.
Afortunadamente no se puede regresar con los conocimientos adquiridos. Me temo que sería usted un verdadero peligro.
Las fotos sí que fueron tomadas en esa hora mágica del atardecer. A mi lo que me transmitió el paisaje es justo lo que usted expresa; paz, silencio y fuerza. De ahí el por qué de la frase que las acompaña.
Muchas gracias por su visita y sus amables palabras que son siempre celebradas. Le deseo mucha energía para dar la bienvenida a ese otoño que asoma.
¿Un peligro Yo? (risas sanas). Si solo intento ser una buena persona! (más risas sanas).
Al menos me alegro de haber acertado con la hora, la hora mágica, un momento muy especial para mí, ya que tengo muchos recuerdos de momentos fascinantes de mi vida a esa hora, conocidos en la psicología como momentos cumbre o en la espiritualidad momentos místicos en los que uno, por unos segundos siente la grandeza de Dios de la Creación y de Dios en el corazón. Y eso me ha pasado siempre en otoño por eso de que el Sol se pone antes y también porque en esta estación y en estas latitudes la gente se recoge antes. Un día si Dios quiere, compartiré con todos Vds. esos momentos en los que como Vd. bien sintió en el momento que hizo estas fotos, paz, silencio y fuerza. Y es más, siempre digo que amo esa hora mágica como el silencio de la noche porque es el momento en el que la actividad terrena y cotidiana cesa y es entonces cuando Dios habla en todas las cosas, especialmente dentro de nuestros corazones mediante la conciencia, conciencia que algunos intentan acallar mediante músicas que no oyen o receptores de televisión para no sentirse solos, cuando la Voz de la Conciencia que es Dios en acción, quiere guiarles, darles el amor que necesitan en forma de cariño o también de una reprensión, que a veces conviene.
Y tras esta disertaciòn nocturna pero muy agradable en este espacio, me despido de Vd. dándole las gracias por su atención y por este rincón tan lleno de paz que es su blog que como le escribí ayer, contrasta con el bullicio de la red social. Yo sí que celebro este espacio.
Muchas gracias también por sus buenos deseos para mí en este otoño, que ya se está dejando notar con una apacible lluvia nocturna.
Buenas noches, felices sueños y un felíz descanso con felices sueños para Vd., Doña Candela.
¡Desde luego. Doña Candela!. Vd. lo ha dicho todo y cualquier comentario estaría de más.
ResponderEliminarComo decía mi profesor de Literatura Española hace,....32 añitos atrás, "LO BUENO Y BREVE, DOS VECES BUENO". Gran verdad. ¡Qué recuerdos aquellos de aquella academia en la que estudié el llamado B.U.P. acrónimo de "Bachillerato Unificado Polivalente". ¡Quién pudiera volver a aquellos años con lo aprendido hoy!.
Bueno, a lo que importa que es apreciar estas fotografías que Vd comparte con nosotros de este parque eólico.
Son realmente muy bonitas y además, según parece o me da esa impresión, tomadas a la hora mágica, esa hora mística de atardecer que tanto me agrada. Son fotografías muy bien tomadas que me aportan paz y sosiego en este pequeño descanso que me he tomado para echar un vistazo a mi red social, hallando la sorpresa de su actualización.
Por cierto, las horas mágicas del atardecer cada día estarán más próximas. Mañana Dios Mediante -como decía aquel párroco-, el Sol entrará en la Constelación de Libra e ingresaremos en el Otoño en este hemisferio.
Y así como el Sol sigue su camino por el Orbe, Yo sigo el mío que me obliga a atender mis obligaciones hoy. Ha sido un placer ver su trabajo, dejar estas letras y saludarla.
Cuídese y tenga un felíz final de día.
Buenas noches don Pedro
ResponderEliminarAfortunadamente no se puede regresar con los conocimientos adquiridos. Me temo que sería usted un verdadero peligro.
Las fotos sí que fueron tomadas en esa hora mágica del atardecer. A mi lo que me transmitió el paisaje es justo lo que usted expresa; paz, silencio y fuerza. De ahí el por qué de la frase que las acompaña.
Muchas gracias por su visita y sus amables palabras que son siempre celebradas.
Le deseo mucha energía para dar la bienvenida a ese otoño que asoma.
Buenas noches y que descanse.
¡Buenas noches de nuevo, Doña Candela!.
ResponderEliminar¿Un peligro Yo? (risas sanas). Si solo intento ser una buena persona! (más risas sanas).
Al menos me alegro de haber acertado con la hora, la hora mágica, un momento muy especial para mí, ya que tengo muchos recuerdos de momentos fascinantes de mi vida a esa hora, conocidos en la psicología como momentos cumbre o en la espiritualidad momentos místicos en los que uno, por unos segundos siente la grandeza de Dios de la Creación y de Dios en el corazón. Y eso me ha pasado siempre en otoño por eso de que el Sol se pone antes y también porque en esta estación y en estas latitudes la gente se recoge antes. Un día si Dios quiere, compartiré con todos Vds. esos momentos en los que como Vd. bien sintió en el momento que hizo estas fotos, paz, silencio y fuerza. Y es más, siempre digo que amo esa hora mágica como el silencio de la noche porque es el momento en el que la actividad terrena y cotidiana cesa y es entonces cuando Dios habla en todas las cosas, especialmente dentro de nuestros corazones mediante la conciencia, conciencia que algunos intentan acallar mediante músicas que no oyen o receptores de televisión para no sentirse solos, cuando la Voz de la Conciencia que es Dios en acción, quiere guiarles, darles el amor que necesitan en forma de cariño o también de una reprensión, que a veces conviene.
Y tras esta disertaciòn nocturna pero muy agradable en este espacio, me despido de Vd. dándole las gracias por su atención y por este rincón tan lleno de paz que es su blog que como le escribí ayer, contrasta con el bullicio de la red social. Yo sí que celebro este espacio.
Muchas gracias también por sus buenos deseos para mí en este otoño, que ya se está dejando notar con una apacible lluvia nocturna.
Buenas noches, felices sueños y un felíz descanso con felices sueños para Vd., Doña Candela.